Biografia de Sofia Gubaidulina  

 

Nacida en la República tártara del Kazan (1931), Sofía es de origen y expresión rusa.

Su música, desconocida durante años fuera de la URRSS, hasta los años 1980 no encontró su lugar dentro de los conciertos occidentales. La Perestroika, finalmente, había permitido al pensamiento y al arte, atravesar fronteras, y en 1986 Gubaidulina, a sus 55 años, pudo salir a occidente por primera vez.
La compositora tiene una aproximación del todo libre, en su trabajo antidogmático, usando lo que le parece más apropiado para cada pieza determinada.
Ella misma se identifica con una posición clásica.

Su infancia atravesó las miserias de la 2ª gran guerra. Sin embargo, de muy joven  su vocación quedó definida entre la dedicación al piano y a la composición.
Al llegar a Moscú, en 1953, ingresó en el conservatorio, y allí completó su formación llegando al fondo de la vida musical de la capital rusa. Pronto empezó a darse a conocer a pesar de su condición femenina que dificultaba enormemente las posibilidades de establecer contacto con los compañeros compositores.

Dice ella misma:
"Desde la edad de 5 años la música era el sentido de mi vida. Cuando fuí mayor se convirtió en la única cosa que me hacía vivir. Un ser humano, hasta en las condiciones más difíciles, hasta en una atmósfera destructiva, necesita tener delante el sagrado. Recuerdo perfectamente mis impresiones de cuando era muy pequeña. En mi vida todo era gris, y sólo me encontraba bien, cuando empujaba la puerta de mi escuela de música. En aquel momento me sentía en un ESPACIO SAGRADO: los sonidos que provenían de las aulas, y el vínculo que unía a los estudiantes, se conjugaban para mi en una armonía politonal de sonidos, y aquél era el mundo en el que yo quería vivir.
La música era mi refugio vital, un mundo ideal, donde las contingencias del entorno no llegaban".